Según Fortune Magazine, en su artículo ¿Por qué los CEO fallan?, se sentencia que el “70% de las estrategias empresariales fallan en lograr resultados deseados”. Si bien es un número abultado, tiene sus razones. Muchos podrían argumentar que es responsabilidad de aquellos CEOs que no tienen visión de negocio, o que derechamente no han sido capaces de desarrollar un plan estratégico para liderar a la compañía hacia la visión, sin embargo en la mayoría de los casos nos encontramos con Gerentes muy inteligentes, con una visión clara, y con un gran sentido de generar estrategias formidables, sobre todo después que se puso de moda la lectura del libro de SunTzu, el arte de la guerra. Entonces, ¿por qué fallan los Gerentes? Las causas de tan elevado porcentaje no radican en la estrategia en sí sino que en la implementación de proyectos adecuados para concretar objetivos estratégicos y con ello, la estrategia trazada.
Esto supone tres grandes problemáticas al interior de la organización: Falta de capacidades en Gestión de la Innovación, falta de capacidad en Gestión de Proyectos o falta de capacidad técnica en la ejecución de los proyectos. Hagamos un desglose de estas causas.
Innovación Tecnológica como estrategia diferenciadora.
Una de las grandes tendencias que se está dando en las grandes empresas es usar como estrategia la diferenciación a través de desarrollo de proyectos ligados a la innovación tecnológica, dado que buscan generar ventajas competitivas únicas para la empresa. Es por esto que cada vez, más empresas apuestan por generar innovación basada en Investigación y Desarrollo, apuntando a dos objetivos en particular:
El desarrollo de proyectos tecnológicos tiene grandes impactos en la empresa, y es altamente recomendable que lo realice una empresa de I+D+i especializada. De esta forma, aquellas organizaciones que requieren innovar pueden apoyarse en empresa externas de I+D para transmitir sus desafíos y así desarrollar proyectos en conjunto que les permitirán beneficiarse con la adopción temprana de tecnologías de modo de generar las ventajas competitivas deseadas. En este sentido CORFO ha jugado un rol esencial en esta tarea, lanzando hace ya unos años líneas de financiamiento para que las empresas usen la estrategia de diferenciación basada en I+D, ya sea que lo hagan con proyectos internos o que lo hagan en forma externalizada. Con este tipo de incentivo, sumándose la Ley de I+D para lograr beneficios tributarios, CORFO hace que el país se alinee con esta tendencia mundial, soportando la idea de que los países no hacen I+D porque son ricos, sino que son ricos porque hacen I+D.